Este artículo reconstruye el proceso de construcción y reelaboración del poder regional en el Estado de México, mediante un examen de las redes políticas entre los líderes del grupo Atlacomulco y aquellos caciques urbanos-sindicales representantes de organizaciones obreras regionales y nacionales. Nos interesa explorar la manera en que cada uno o en coaliciones, establecieron procesos de lucha y/o negociaciones con el Estado nacional tendientes a salvaguardar el control político de la entidad. A través de la reconstrucción de dichos procesos políticos intentamos interrogar la manera en que la política mexiquense esta moldeada por el fenómeno del caciquismo, y hasta qué punto las interpretaciones “clásicas” de éste siguen siendo vigentes para entender las realidades contemporáneas de la región.