Encuestas dirigidas a pediatras en Costa Rica sobre el manejo de patologías oftalmológicas

Abstract

La patología oftalmológica en la edad pediátrica es frecuente y variada según la edad y factores de riesgo de cada paciente. Hasta este momento, no existen estudios en Costa Rica que determinen cuáles son los patrones de diagnóstico y manejo de los pediatras al valorar pacientes con sospecha de patología oftalmológica. Métodos: Se utilizó una encuesta en línea a 250 especialistas en pediatría que se encuentran ejerciendo activamente en Costa Rica, tanto en el ámbito público como privado. La encuesta incluye características epidemiológicas de los pediatras, del centro y el área donde se desempeñan. Además se realizan preguntas sobre etiología, fisiopatología, prevención y manejo de patologías oftalmológicas frecuentes en la infancia. Resultados: Se obtuvo respuesta de 74 pediatras. El 58% son pediatras generales y el 55% tienen más de 10 años de experiencia. En patologías como retinopatía por prematuridad y obstrucción de conducto naso lagrimal la mayoría de los pediatras cumple las recomendaciones de la Organización Panamericana de la Salud. Con respecto a la dacriocistitis y el manejo de la conjuntivitis alérgica y bacteriana encontramos la mayor heterogeneidad entre los pediatras y discordancia con respecto a las guías de manejo sugeridas por la Asociación Americana de Oftalmología. Conclusiones: Existe gran variabilidad en la práctica de los pediatras son respecto al manejo de patologías oftalmológicas frecuentes. En patologías como retinopatía de prematuridad y obstrucción conducto nasolagrimal hay un adecuado manejo según recomendaciones internaciones. Por el contrario en dacriocistitis y conjuntivitis no existen guías de manejo para Costa Rica y la mayoría de pediatras no cumple con las recomendaciones de la Asociación Americana de Oftalmología.

In the pediatric practice the ophthalmological pathology is frequent and varied according to the age and risk factors of each patient. Until now, there are no studies in Costa Rica that determine the diagnostic and management patterns of pediatricians when assessing patients with suspected ophthalmological pathology. Methods: We conducted an online survey of 250 pediatricians who are actively practicing in Costa Rica, both in the public and private practice. This survey includes epidemiological characteristics of the pediatricians and their working centers. Questions about etiology, pathophysiology, prevention, and management of frequent ophthalmological pathologies in pediatric population are also included. Results: We obtained response from 74 pediatricians. Most of them are general pediatricians and 55% have more than 10 years of experience. In pathologies such as retinopathy of prematurity and naso-lacrimal duct obstruction, most pediatricians follow the recommendations of the Pan American Health Organization. Regarding dacryocystitis and the management of allergic and bacterial conjunctivitis, we found the greatest heterogeneity among pediatricians and contrast regarding the guidelines suggested by the American Association of Ophthalmology. Conclusions: There is great variability in the practice of pediatricians regarding the management of frequent ophthalmological pathologies. Pathologies such as retinopathy of prematurity and naso-lacrimal duct obstruction are properly managed . For dacryocystitis and conjunctivitis, there are no guidelines in Costa Rica and most pediatricians do not follow the recommendations of the American Association of Ophthalmology.