Las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) son una herramienta que tiene el potencial de contribuir a mejorar las condiciones de vida de la sociedad si es bien orientada. Las TIC se han convertido en una extensión de nosotros mismos a través de un sinfín de aplicaciones que nos apoyan en diversas tareas. Es por esto que, los desarrolladores de tecnología deben conocer las necesidades del destinatario, adecuarse a sus requerimientos y tener conocimiento del contexto de aplicación; es decir, deben entender que un desarrollo tecnológico involucra también a la parte humana. Las TIC pueden ser una herramienta de apoyo en el área de la salud, es por ello que en la actualidad la e-Salud, Telesalud y Telemedicina son disciplinas de gran interés. El uso de las TIC pueden aportar a mejorar la atención a pacientes, ya sea como apoyo y seguimiento de la parte administrativa, llevar un registro clínico, el registro de los fármacos, monitoreo a pacientes, dar consultas en áreas remotas, capacitar a su personal en áreas remotas, entre otras. Para que la tecnología sea aceptada tanto por gente que brinda un servicio asociado a la salud como por los pacientes, existen varios factores importantes relacionados con la calidad, tanto en su dimensión interna como externa que deben tomar en cuenta características cualitativas, subjetivas y de satisfacción o de adecuación entre niveles cognitivos que presenten el usuario y la herramienta desarrollada. Anteriormente, se generaban recomendaciones para atender parámetros técnicos, pero mediante la introducción del término Calidad de Experiencia (QoE), se ha demostrado que es importante poner atención tanto a la parte objetiva como a la subjetiva en la interacción del humano con la tecnología digital. Al usar QoE, se sugiere que las emociones que se generen en el uso de un determinado equipo o dispositivo tecnológico tienen gran impacto en su usabilidad. En el presente trabajo se genera un modelo basado en el análisis de los actores que constituyen el sistema de e-Salud, resaltando la importancia que tiene el llevar a cabo un análisis integral del entorno de aplicación en este sistema; para que la tecnología sea un apoyo efectivo para los médicos y pacientes. Dadas las características del modelo desarrollado, su aplicación se puede dar en a áreas vulnerables donde el uso de la telemedicina apoya el despliegue de aplicaciones tecnológicas para la salud. Bajo esta premisa, se debe considerar que es clave el adecuar la tecnologInformation and Communication Technologies (ICT) have become an important tool with potential to improving living conditions. ICT are immersed in practically all human affairs; under these circumstances, technology and society are inseparable. By the same token, technology developers must understand the conditions and requirements of the users, as well as the nature of the context. They must understand that technology development also involves human aspects, i.e., people must be considered the central element and purpose of technology design. In this regard, Quality of Experience (QoE) has been used as an important tool for assessing the usability and user acceptance of a particular device, service or technology application. International standard setting agencies, technology manufacturers, as well as academic groups have relied on QoE estimations to understand the interactions of technology and human behavior. In this contribution, we draw on complexity science to incorporate in the estimation of QoE the interplay of the ecosystem, the behavior, and the interactions among the agents. We provide a platform to estimate QoE to assessing the relationship between technology and human factors involved in e-Health projects. Our proposal is focused on a rural environment, given that e-Health interventions have been useful to respond to critical sustainable development needs in these contexts. In this work, we apply a heuristic procedure to incorporate complexity principles for estimating QoE using Fuzzy-Logic simulations in order to understand the influence of human factors in a gynecology intervention intended for a rural setting. The results of our simulation show that the applications of complexity principles in our e-Health intervention may contribute to develop integrated design strategies of devices and systems, thus providing, a balance of technology performance and human behavior, i.e., a balance between QoS, Quality of Service (technology performance metric) and QoE (human and technology performance metric). In other words, QoE offers valuable information for developing and designing devices and equipment taking into account factors involving emotions and other variables of human nature associated to a particular context. Likewise, it is relevant to stress that our ecosystemic approach was also key to identify and analyze complexity traits in the resulting simulation scenarios. Furthermore, complexity was an important enabler to refine the estimation of