dc.description.abstract | La muerte está constituida por una sucesión de fases de
desestructuración rápida y progresiva del funcionamiento
integrado del organismo, como unidad biológica. Bajo este
paradigma biomédico, el cuerpo sin vida de una persona sigue
siendo visto como un objeto, al igual como se percibe desde la
mirada cartesiana. Al ver como día a día los cuerpos humanos
sin vida, son irrespetados, degradados y vistos como simples
objetos; nos motivamos a realizar este trabajo, cuyo objetivo
general fue interpretar el significado asignado al fenómeno desde
la perspectiva de los sujetos del estudio. Este estudio se realizó
bajo la matriz epistémica fenomenológica. Se utilizó el diseño de
Herbert Spiegelberg y la entrevista a profundidad a siete sujetos
vinculados al fenómeno, seleccionados de manera intencional.
Ellos describieron el fenómeno desde sus propias experiencias,
y a través del procesamiento de la información emergieron tres
categorías: cuerpo humano sin vida, trato al cuerpo humano sin
vida, y la muerte. De allí surgió la teoría emergente: Al cuerpo
humano sin vida, le fueron asignados valores inherentes a su
condición humana como el amor, el respeto y la dignidad, los cuales
tienen trascendencia más allá de la muerte física de las personas,
e implican un trato con consideraciones propias del derecho natural
a morir dignamente. Esa visión de preservación de la condición
humana, como un estado transitorio entre la vida y una existencia
póstuma en un territorio desconocido, refleja una prolongación de la
vida, como también ocurre con el sentimiento de no abandonar el
recuerdo de la persona fallecida | |