La investigación se presenta de manera diacrónica para el período 2006-2016 y con proyecciones para el período 2016-2030, considerando: variables socioeconómicas (tales como densidad poblacional, viviendas no planificadas, entre otros); patrones de uso del suelo que permiten la cuantificación de la expansión urbana y los conflictos de uso de suelo; y por último las restricciones físicas del terreno para el soporte de infraestructuras de viviendas.