El juego temprano y variado contribuye de un modo muy positivo a todos los aspectos del crecimiento. Estructuralmente, el juego está estrechamente vinculado al desarrollo infantil. En investigaciones previas se ha evaluado la influencia del mismo en la sociabilidad de niños de seis años en adelante, encontrándose un efecto beneficioso en las habilidades sociales. La presente investigación tiene como objetivo fundamental evaluar el efecto de un programa de abordaje basado en juegos cooperativos sobre la adquisición y aprendizaje de la conducta pro-social en niños de edad pre-escolar.Paraello se empleó la validación de una serie de juegos por parte de expertos en el área para su posterior aplicación. Se llevó a cabo un estudio de campo experimental, en donde se empleó un diseño pre test, pos test, con grupo control, esto a una muestra de 6 niños, 3 pertenecientes al grupo control y el resto al grupo experimental. Los resultados sugieren que los juegos surtieron efectos sustantivos, sin embargo, mejoras en el grupo control en la medida final indicala actuación de otras variablessobre los resultados. En concordancia con otras investigaciones, se puede concluir que los juegos tiene un efecto beneficioso en las interacciones sociales de los niños.Tesis P14 - 2014 -