Esta investigación titulada La destrucción de la imagen de Cristóbal Colón en la estatuaria pública caraqueña, se propone a estudiar las causas del derribo o retiro de aquellas obras escultóricas que representan a Cristóbal Colón (c.1450-1506) del espacio público caraqueño, puesto que las dos únicas figuras existentes abandonaron sus emplazamientos en circunstancias excepcionales: el monumento a Colón en el Golfo Triste, realizada por Rafael de la Cova (derribado el 12 de octubre del 2004) y su efigie en el paseo El Calvario realizada por Giovanni Turini (retirada el 17 de marzo de 2009). La ausencia de éstas causó y sigue causando polémica en los medios, y ha sido tema de la crítica de arte. No obstante, la mayoría de estos estudios se remiten a tratar el papel que el discurso y las políticas culturales del gobierno de Hugo Chávez Frías jugaron en estas acciones, faltos de interés en indagar la posibilidad de que la naturaleza de la imagen haya tenido alguna influencia. Nuestro primer objetivo, como es de esperarse, fue estudiar la destrucción de la imagen de Colón en la estatuaria pública de la capital venezolana, y para ello, revisamos el papel que la escultura pública ha tenido desde la creación de las ya nombradas piezas (finales del siglo XIX) y su desaparición (principios del siglo XX). Además, otro de nuestros objetivos fue realizar una investigación del lugar que ha tenido Colón como figura pública en el marco del período anteriormente especificado, para finalmente dedicarnos a reflexionar sobre las posibles causas de la destrucción de estas imágenes. Para nuestro estudio, de carácter puramente documental y bibliográfico, nos servimos de una metodología de corte sociológico, que establece que no existe obra de arte sin conexión o deudas con el entorno social en el cual se produjo. En general, se acepta que el arte sirve como medio de propaganda de ideas y establece relaciones de dominio social en cualquier época de la historia del hombre, por ende, aquellos campos derivados de la economía de la sociedad productora, como son el político, cultural e ideológico, ejercen innegablemente influencia sobre su producción. Por esta razón se hizo necesario realizar un recuento histórico de todos aquellos hechos político-económicos y sociales que pudiesen influir en el pensamiento que hizo de Colón un objeto de culto y, más adelante, receptáculo de violencia. Para abarcar tal amplitud histórica y diferentes enfoques (como monumento, como personaje histórico y como imagen), esta investigación se compone de cuatro capítulos. El primero de ellos, “El papel de la escultura pública en Venezuela desde el último tercio del siglo XIX hasta finales del siglo XX”, se dedica a documentar el lugar que ha tenido el monumento en la cultura occidental, con antigua tradición en el viejo continente, las circunstancias que propiciaron el comienzo de la práctica monumentalista en Venezuela, así como los cambios políticos, económicos y sociales que modificaron su relevancia como parte de los proyectos urbanos particularmente de la capital. En el capítulo segundo, “Cristóbal Colón como figura pública en Venezuela”, estudiamos la evolución de la opinión que públicamente se ha tenido sobre el descubridor desde que se erigieron sus efigies hasta la actualidad, estableciendo relaciones entre el discurso de los diversos autores que han opinado sobre él y su hazaña, y su contexto políticosocial. En nuestro tercer capítulo, “La destrucción de las imágenes de Cristóbal Colón en Caracas”, nos dedicamos a describir cuándo y cómo tuvieron lugar dichos actos de destrucción y rechazo, exponiendo las consignas de sus agresores y las diversas opiniones que proliferaron en los medios de comunicación impresos al respecto. Finalmente en el último capítulo, “Reflexiones sobre los casos estudiados”, hacemos un recuento sobre la importancia de la imagen figurativa, las teorías más importantes que se han planteado responder sobre su “utilidad” a lo largo de la historia y el por qué el hombre en ocasiones responde a ellas de forma violenta, así como establecemos comparaciones entre lo sucedido con las esculturas de Colón y ciertas prácticas ya establecidas siglos atrás. De igual manera, realizamos una breve reflexión sobre las relaciones imagen-iconoclasia-mass media en la era de la tecnología informática. Efectivamente, las obras trabajadas, como la imagen en general, han servido desde su creación como medio de propagación de ideas y de formas de pensamiento particulares, por ende, han tenido una gran influencia sobre el espectador a nivel ideológico. Conforme se ha modificado la ideología, ha cambiado nuestra opinión sobre lo representado en estas imágenes, y el rechazo a Colón equivale precisamente a la aversión por su representación, ya que la percibimos, de forma “inconsciente”, como su personificación. La representación verosímil conlleva a que actuemos sobre la imagen como actuaríamos si el personaje estuviese presente.