En noviembre del 2019, Shinzo Abe se convertía en el Primer Ministro de Japón que más tiempo pasó en el cargo, habiendo asumido en diciembre de 2012. Menos de un año después, el 28 de agosto del 2020 anunció su renuncia alegando graves problemas de salud. Dada la inestabilidad política que caracterizó al sistema político japonés hasta la llegada de Abe y su estilo personal de llevar adelante la política exterior, su salida planteó muchas preguntas no sólo en el plano doméstico sino para las relaciones internacionales del país. En principio, algunas de ellas fueron resueltas al anunciarse el 16 de septiembre de 2020 que el ex jefe de gabinete de Abe, Yoshihide Suga, asumiría como Primer Ministro. Suga es considerado como su mano derecha, por lo que se espera que continúe -en líneas generales- con las políticas de su predecesor, por lo menos hasta septiembre de 2021, mes en el que finalizaría el mandato. Más allá de las incertidumbres que presenta el futuro político nipón, el momento es oportuno para hacer una revisión de los 7 años y medio de gobierno de Shinzo Abe. El objetivo del presente artículo radicará, entonces, en recorrer las diversas iniciativas del Primer Ministro saliente en el ámbito internacional para realizar un balance de su política exterior.Fil: Zalazar, Marina. Universidad Nacional de Rosario. Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales; Argentina.