Artículos de revistas
Inculturar el crecimiento
Fecha
2003Autor
Fernández, Víctor Manuel
Institución
Resumen
Introducción: Continuando con la reflexión del autor sobre la espiritualidad evangelizadora descubrimos como ella llama a una penetración progresiva en la cultura local de la que se trate, dentro de un proceso de crecimiento. En el proceso de inculturación se deben revisar los elementos culturales que, según los
criterios evangélicos, podrían ser superados. Por ejemplo, todas aquellas costumbres
que conllevan conductas discriminatorias hacia ciertos sectores sociales (la mujer, los
extranjeros, etc.); pues entendemos que toda cultura está llamada a crecer.
Cuando la Iglesia entra en comunión con una cultura la enriquece al mismo tiempo que
se enriquece (cf GS 58c). Esto implica que el evangelizador, al inculturar su
espiritualidad, no es solamente receptivo, sino que también aporta algo a la cultura de
su pueblo, lo enriquece. Si se trata de una cultura no cristiana le ofrece la luz del
Evangelio. ¿Pero qué aportará cuando ya están inculturados muchos valores cristianos
y una espiritualidad popular, como la de nuestros pobres? El reconocimiento de que
ese pueblo está llamado a crecer y a enriquecerse más todavía con la vida de la gracia
y con la luz del Evangelio, procurando generar más belleza en sus rasgos para que
Cristo resplandezca todavía más en ese lugar.