Trabajo de grado - Pregrado
Los efectos socioeconómicos de la privatización portuaria Incidencia en la "Ciudad-Puerto" de Buenaventura
Fecha
2000-06Autor
Kafuri Paipa, Lorena
Rivas Tenorio, María Teressa
Institución
Resumen
A partir de la década del 90, con la nueva visión proyectada por los gobiernos
nacionales de incentivar la privatización de las empresas estatales, abrigó de
esta manera el cambio para las empresas de Puertos de Colombia que era el
eje del 100% de las operaciones que se ejecutaban por el puerto de
Buenaventura y que en cierta parte entorpecían la productividad y el desarrollo
económico.
Por medio de la ley 1 de 1991 se constituyó la Superintendencia General de
Puertos, una de sus funciones principales es la de regulación tanto económica
como tarifaria de las Sociedades Portuarias Regionales, entidades creadas para
administrar los terminales marítimos en Colombia.
La fijación de precios y tipos de sistemas regulatorios que se aplicaron fue la
de precio techo y piso, determinando los lineamientos generales para el cálculo
de tarifas donde se tenían en cuenta factores como los costos, las tarifas
internacionales y la eficiencia.
De esta forma los puertos no sólo fueron lugar de encuentro de mercancías,
sino también de encuentro de hombres, ideas e intereses diversos; en ellos se
localizan hombres de negocios, comerciantes, empresas navieras y técnicas de
trabajo que a la prostre avanzan más rápidamente que en ciudades del
interior. La llegada de la privatización, desmanteló toda la estructura del
empleo adicional y orientó las fuentes de empleo hacia las operadoras
portuarias que tomaron la actividad otrora ejercida por el ente oficial y que
pasaron a ser privadas. Desde entonces la estabilidad laboral, los ingresos y la
seguridad social han estado en tela de juicio debido a la forma particular con
que se mueve laboralmente la actividad portuaria y que no encaja en ningún
artículo de la ley laboral vigente.
En la liquidación de la Empresa Puertos de Colombia fue muy difícil que el
pensamiento de la comunidad aceptara tener que renunciar a la, en ese
entonces, relativa comodidad que la empresa les brindaba y cambiar a un tipo
de vinculación laboral sensiblemente inferior.
El régimen laboral ha afectado igualmente la cantidad global de empleo, en
razón de la rigidez de su estructura, además ha desestimulado la contratación
de trabajadores permanentes, incentivando despidos prematuros y la
contratación de trabajadores temporales.
Quizás el cambio más notable que ha traído el esquema de concesiones es el
ostensible mejoramiento de la capacidad operativa de los puertos. Con la
privatización, los puertos colombianos redujeron sus tiempos de trabajo, las
tarifas que se aplican directamente a las líneas marítimas y el tiempo que los
buques debían esperar se disminuyeron gracias a las inversiones en tecnología,
ya que se traduce en la capacidad de la infraestructura portuaria actual de
atender los movimientos de las cargas del País en el mediano plazo sin
congestiones significativas en los puertos.
El proceso de privatización del puerto de Buenaventura, ha tenido un relativo
éxito. Todos los indicadores de rendimiento se dispararon, la nación no se
está desangrando financieramente, se está prestando un mejor servicio y el
País está mejor preparado para la globalización