Tesis Doctorado
Encrucijadas entre trabajo y familia. Contratos de género y transformaciones sociales en temporeros/as del vino en casablanca y mendoza
Autor
Valdés Subercaseaux, Ximena
Universidad de Santiago de Chile
Institución
Resumen
El problema de investigación, transformaciones en el cruce entre trabajo y familia. La sociedad rural, a partir de los años 60, fue testigo de una serie de transformaciones que estremecieron a las viejas instituciones agrarias. Los cambios en la estructura de la tenencia de la tierra y posterior reconversión productiva producida en el marco de la instauración del neoliberalismo en la economía en general y en la agricultura en particular, tanto en Chile como en Argentina, modificaron las formas tradicionales de producción y la estructura del mercado laboral.En Chile, la descomposición de la hacienda tradicional y casi desaparición del latifundio, con la reforma agraria (1964-1973), dio paso a la instauración de empresas agroexportadoras capitalistas de corte moderno y complejos agroindustriales, vinculados o pertenecientes a corporaciones transnacionales, transformando las relaciones sociales y técnicas de producción agraria, y desencadenando la proletarización de la población rural. En las zonas agrícolas donde predominaban campesinos y parceleros, surge una propiedad empresarial y un nuevo tipo de empresario agroindustrial que adquiere tierras. La desintegración del sector reformado contribuyó al crecimiento del capitalismo agrario, pues los antiguos propietarios que retuvieron una reserva la capitalizaron y prosperaron bajo el actual modelo económico (Rebolledo, 1997: 1-6; Kay, 1995: 60-68). Cambios similares ocurren en Argentina desde los años 90, a partir de la preminencia de políticas neoliberales en el sector agrario, intensificándose el dominio del capital sobre el agro (Chazarreta, 2005: 10-11), así como la apertura a capitales inversionistas extranjeros, orientados a producir para el mercado internacional, fomentando los monocultivos. En ambos países las formas de producción actualmente en uso, se basan en la flexibilidad laboral, expresada en una demanda de fuerza de trabajo agrícola que se incrementa en los períodos de cosecha, relaciones contractuales por tiempo o faena, fragmentándose cada vez más, implantación de remuneración pactada por unidad de medida o “a trato” que elimina el salario estable, y jornadas laborales que se extienden y desestandarizan.