Somente em l´espanhol.Seulement en espagnol.Only in spanish.La centralidad del mundo del trabajo —en el sentido de las relaciones sociales que lo integran: proceso de producción y de trabajo, compra y venta de fuerza del mismo, relación salarial, calificación de la fuerza de trabajo, organización sindical, y demás, siguen siendo fundamentales dentro de la sociedad actual— y el carácter de la fuerza de trabajo como fuente creadora de valor en el capitalismo contemporáneo no pudieron ser anulados ni por los teóricos que desde la naciente década de l980 se dedicaron, como un oráculo, a predecir el fin del trabajo y la muerte del proletariado, ni por el capitalismo y sus leyes en plena transición salvaje, a no sabemos qué. Éste, se convirtió en un capitalismo voraz, parasitario, de ganancia inmediata y para ello modificó las inversiones de lo productivo a lo especulativo y se hizo de “nuevos paradigmas” organizacionales y productivos, que no llegaron a resarcirlo de sus crisis de valor. Éso es lo que demuestra Adrián Sotelo Valencia en su obra.