| dc.description.abstract | En la primera mitad de los años ochenta, la inestabilidad política y desajustes económicos en Bolivia, limitó la cooperación internacional; en la segunda mitad la prioridad fue la estabilidad económica y fue financiada por la cooperación internacional. Los años noventa fue un periodo de ajuste programático de la cooperación internacional. Finalmente, el 2006, se elaboró un Plan Nacional de Desarrollo, que establece: “que los recursos de la Cooperación Internacional se canalizarán de acuerdo a sus lineamientos estratégicos”.
La cooperación internacional ha sido y sigue siendo importante para la inversión pública. La cooperación internacional se ha instrumentado mayoritariamente a través de préstamos; a pesar de ello, no se puede obviar el relevante papel que tienen las donaciones.
Una de las agencias de cooperación que adquirió protagonismo a través de sus volúmenes de ayuda fue la Cooperación del Gobierno de Japón, que inicia sus operaciones en Bolivia a partir del año 1962. El Gobierno de Japón brinda su cooperación a través de sus distintas modalidades; como la cooperación financiera no reembolsable y cooperación técnica; en lo que se refiere a la cooperación financiera reembolsable, se ha condonado totalmente la deuda bilateral.
En términos sectoriales, el financiamiento de la Cooperación del Gobierno de Japón se concentra en el sector social, según su política de “Seguridad Humana”, y sus metas de apoyo ligadas con los “Objetivos de Desarrollo del Milenio”, enfatizando su esfuerzo en la satisfacción de necesidades primarias con la erradicación de la extrema pobreza, educación primaria, agua y saneamiento básico y salud. | |
