Si hay algo que une los ensayos recogidos en este libro es la defensa del carácter primordialmente hispano que tendría la nación dominicana. Ya sea a través del estudio de los medios para la enseñanza de la lengua, o bien a través del trazo de un perfil biográfico determinado, los trabajos aquí presentes parten de la idea de que la hispanidad anida en la dominicanidad y de que del mantenimiento y protección de dicho elemento cultural depende la pervivencia de lo que conocemos como República Dominicana. Es en tal virtud que el autor hace una puesta a punto de las que considera ser tergiversaciones históricas y conceptuales de los discursos políticos de la izquierda intelectual dominicana. Polemista inveterado, el autor esgrime con denuedo sus argumentos y razones en unos textos que tienen como eje central la difícil cuestión de lo que define lo dominicano.