En la planta “Damují” de la provincia de Cienfuegos, Cuba, se produce una gran parte del papel kraft empleado en las cajas de cartón que se usan como envases y embalajes. Esta empresa ha presentado diversos problemas con las autoridades ambientales por la contaminación que genera a su río homónimo, hacia el cual vierten sus efluentes líquidos y por las emisiones de gases y el consumo excesivo de su caldera de generación de vapor. El proceso de producción estaba sujeto a la introducción de tres posibles mejoras: Cierre del circuito de agua, el cual permitiría reutilizar el agua en el proceso reduciendo su consumo actual y el uso de aditivos químicos, los cuales también se recuperan; cambio de la caldera de generación de vapor por una más eficiente, lo cual disminuiría la cantidad de vapor generado por unidad de combustible; la otra posible alternativa era la reactivación del sistema de residuales de la planta, el cual se encontraba en muy mal estado.