Los forrajes son la fuente de nutrientes que mejor se adapta a las necesidades fisiológicas del vacuno, y generalmente son también las más baratas (Vélez, 1994). Las condiciones del trópico tienen efectos directos sobre la calidad de los forrajes, haciéndolos de menor valor nutricional en comparación con los forrajes de clima templado. Cuando no existen limitantes de tipo ambiental o nutricional., el potencial para el consumo alimenticio está determinado por el potencial genético de producción del animal, al mismo tiempo la cantidad de alimento consumido determina el nivel de productividad que se logre (Prestun y Leng, 1990). Existen varias maneras disponibles para mejorar la calidad de dietas basadas en forrajes, requiere conocimientos de los diferentes nutrientes necesarios para la producción, y la habilidad del forraje para suplir estos nutrientes (Minson,1990).