masterThesis
Evaluación del sistema de recomendación de patrones pedagógicos (SRPP) en cursos de Geometría Euclidiana
Autor
Rodríguez Buitrago, Orlando
Institución
Resumen
La situación del profesor universitario, a diferencia de otros colectivos docentes, se caracteriza por no tener una formación específica como profesionales de la enseñanza. Su formación, en cuanto a la docencia se deriva de su propia experiencia, y en muchos casos, los profesores universitarios carecen de instrumentos didácticos que les permitan analizar y reflexionar sobre su labor como docentes, y todo lo que ello supone (García-Valcárcel 2001). Las funciones del profesor universitario deben ser analizadas desde la concepción del mismo como un especialista de alto nivel dedicado a la enseñanza y miembro de una comunidad académica. Diremos que “el profesor universitario, en cuanto profesor, es una persona profesionalmente dedicada a la enseñanza, un profesional de la educación que necesariamente comparte con los profesores de otros niveles unas funciones básicas orientadas a que otras personas aprendan. En segundo lugar, es un especialista al más alto nivel en una ciencia, lo cual comporta la capacidad y hábitos investigadores que le permitan acercarse a, y ampliar, las fronteras de su rama del saber. En tercer lugar, es miembro de una comunidad académica, lo que supone la aceptación, y conformación de la conducta, a un conjunto específico de pautas, valores y actitudes que, de alguna manera, reflejan una determinada percepción de la realidad y caracterizan y dan sentido a una forma de vida” (De la Orden 1987). Es así como las funciones del profesor universitario son varias y con diferente carga de dedicación, interés y prestigio. Los ámbitos básicos de su dedicación son: la docencia, la investigación y la gestión, siendo esta última la actividad que en general es menos atractiva para ellos. Por su parte, la investigación es muy apreciada, y por ellos es la función que más tiempo consume y más beneficios reporta. En opinión de De Miguel (De Miguel 1991), el profesor universitario está demasiado imbuido en su rol de profesional o de científico de una disciplina, y desde ese rol intenta ejercer su acción docente. La consideración de “buen profesor” en el mundo universitario se ha ligada al concepto de “buen investigador”, generando con ello, algunos vacíos en los procesos de enseñanza aprendizaje.